que nos cuiden
que nos sueñen cada noche
Antes de esas palabras la protagonista de EL PÁJARO DE LA FELICIDAD abrió el poemario y leyó : Si yo fuera Dios..
Y recordé a un hombre que me habló desde una montaña y otro desde una autopista mientras llovía, quizás volvieron a leer a Ángel Gonzalez.
1 comentario:
¡Qué mirada la de la Miró! ¡Se van siempre las mejores! Nos enseño a contar eso… “que nos escuchen, que nos cuiden, que nos sueñen cada noche” mira que es sencillo… pues sigue vigente. Mis felicitaciones por tu blog, es muy personal.
Carmina.
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