"Cuando a veces, la vida,
se parece a un cuento, las rodillas dejan de hacer daño durante cincuenta y
seis minutos al día. Las avispas pican siempre en el mismo lugar, y por el aire
vuelan páginas de libros que aterrizan
en los tejados de los desgraciados, los hambrientos, los niños huérfanos de
madre, los alcohólicos, los locos, y los cuerdos desesperados.
Las páginas dejan una sola palabra en esos tejados.
Así, ofrecen la risa a ls desgraciados, el helado de
chocolate a los hambrientos, un cuento a los niños huérfanos de madre, un vaso
de agua con gas a los alcohólicos, un poema a los locos, y un gintonic a los
cuerdos desesperados."
(Te deseo un día de estos , como si los deseos pequeños fueran alcanzables, me he dicho mientras me cepillaba los dientes esta mañana )
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