Si tienes 20 años y vives en el ACTUR el Pabellón de Interpeñas te parece fantástico, si tienes 40 y además madrugas la cosa cambia.
En un ataque de nostalgia visito La Feria de Muestras buscando los olores y la multitud de las fiestas de toda la vida, pero el stand de los donuts no estaba en su sitio, ni el de los lacasitos, los lotes de chorizos y los salchichones si, menos mal! Y los limpiadores mágicos y los mostradores con vajillas estupendas, aunque tuvieran los platos cuadrados de esos que dice mi amigo Moisés no son platos ni son nada! Y es que la edad tiene eso, él está jubilado y yo me he vuelto menos tolerante.
He visto una escultura hermosa de Valeriano Roma, eso ha sido después de los perros militares, q listos y q feos eran los pobres! Luego los autocaravanes , ¡que para qué miraremos eso si no conozco a nadie q lo compre por mucha oferta que sean los tropecientos euros con neón fosforito . De vuelta a casa , con el queso de Burgos recién comprado, resignada a sufrir el concierto de cada noche, que entra distorsionado, sin saber por donde hasta el sofá de tu casa aunque cierres las ventanas y bajes las persianas hasta el infinito, escuchas a tu niña decir: Jo mamá, q bien! lo que me estoy ahorrando en taxis!
Bueno, puedo comprar los donuts en el super ,le digo, pero ella ,claro, no entiende nada.
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