jueves, 2 de octubre de 2008

EN LOS ALTARES NO SE PUEDE DORMIR




Llega un diablo rubio, silba,

se arquea y con la paja de su cabeza

incendia sus costados,

a mi también me sorprende

y me hecho a un lado

Es apasionante verlos deshacer la enredadera.

Luego intento dormir como si fuera un nido,

pero es imposible.



..en los altares no se puede dormir.






2 comentarios:

Anónimo dijo...

Isabel te superas, arebatador, esto es crear espacios mágicos y sensuales,¡ vendigo tu poesía! y ardo como tu antorcha.
Gracias
Aristoclo

Anónimo dijo...

Y segun lo que leas al tiempo de irte a la cama tampoco.